Status SocioEconómico

Me declaro de nivel socioeconómico ABC0 (ABC-Cero), gano como ABC1 pero al final de mes que queda cero...cero...cero!!!.

El poder de la desconexión

Hace algún tiempo uno podía determinar el status de las personas dentro de las organizaciones usando como referencia su capacidad de conexión (El poder de la conexión), me explico: cuando se empezaron a utilizar los Laptop, los primeros en tener uno fueron los Gerentes y los Ejecutivos, con ellos se podian conectar a la oficina utilizando su MODEM, luego al publicar en Internet los correos internos, los primeros que los pudieron acceder a ellos fueros estas mismas personas, ya que además por costo de conexión a Internet esto no era muy masivo. Ahora, si con tu celular puedes ver tus correos, contestarlos, ver tu agenda y contactos además de hablar por teléfono, claramente eres una persona importante, especialmente si no sabes responder la pregunta ¿Tienes un Celular con PDA ó una PDA-Celular?...
Pues bien, con la baja de precios que han experimentado los laptop así como los costos de acceso a internet, además de la masificación de nuevos dispositivos PDA-Celular (o viceversa) todo el mundo esta conectado, todos pueden ser fácilmente ubicados sin importan donde están y nadie puede decir que no vio sus correos o que no pudo contestar alguno… Imagina un técnico o similar al que se le requiera urgente un Sábado en la noche, impensable que tenga su celular apagado…pobre de él.
Por esto mismo creo que el Poder esta ahora en la desconexión, si tengo el suficiente poder, perfectamente puedo apagar por el fin de semana mi celular, mi Laptop o decidir que no atender, además puedo leer mis correos el Lunes, total ¿Quién me va a decir algo?

Una Tarde Mágica

Es el primer domingo de Septiembre, es la media tarde y afuera esta nublado, no hace mucho frió. Propongo mi hija salir a caminar…como vivo cerca de una de las pocas plazas que tienen vida propia (La plaza Perú) nada mejor que visitar la feria de antigüedades y pasar por los juegos infantiles.
Al llegar, la plaza irradia vida y alegría, personas de todas las edades caminan por un pasillo que se forma con los puestos de antigüedades y en el sector de los juegos infantiles, un gran numero de niños juega y se divierte.
Después de pasear por los puestos, nos sentamos en la típica banca de la plaza justo en el sector de los niños… a mi izquierda niños ya mayores haciendo skate, al frente los resbalines y a mi derecha los columpios.
El sol esta en pleno crepúsculo, el cielo se tiñe de amarillo intenso y comienzan a sonar las notas de un organillo, en un instante el lugar se llena de música y burbujas de jabón, los niños saltan detrás de ellas, otros miran fascinados los cachivaches que cuelgan del organillo y el organillero se siente y es el centro de atención, la música fluye y de pronto un sonido:“pip-pip-pip, pip-pip-pip”, la música cesa, se acaban los cientos de burbujas, los niños dejan de correr y saltar, llaman por celular al organillero, este contesta…y se acabo la magia.